IA para salud: copiloto, no reemplazo.

La inteligencia artificial está transformando el atendimiento médico pero no va a reemplazar al médico, advierte un ensayo de la revista TIME que señala cómo maximizar el uso de herramientas sin perder el juicio clínico y la comprobación independiente. En la práctica clínica, algoritmos ya reinterpretan análisis y estudios por imagen ante la mirada del profesional, acelerando el triaje sin borrar la necesidad de una lectura experta.

Adopción en aumento

El uso de la IA en la salud aumentó exponencialmente: más de mil herramientas tienen licencias regulatorias en EE. UU. y dos de cada tres médicos afirman usar IA en alguna función, ha informado la Asociación Médica Americana. El salto año a año desde 2023 fue del 78%, motivado por promesas para aliviar burocracia, mejorar la precisión y personalizar la atención.

En qué contribuye hoy

La IA ya escribe notas clínicas y resúmenes, identifica anormalidades finas de imágenes, acelera la identificación de fármacos y brinda asistencia personalizada a pacientes (consultas, preguntas, reacciones adversas). Ayuda también a emparejar sujetos para ensayos y a monitorear datos en tiempo real para alertas tempran0s y mejores desenlaces.

Limitaciones y riesgos

Los modelos no son oráculos: ven patrones y ayudan a tomar decisiones, pero pueden fallar e intensificar sesgos si se utilizan sin guía. Recientes investigaciones demuestran ventajas con contrapartidas, como un aumento de falsos positivos o excesiva dependencia del sistema.

Evidencia en imágenes

Un grupo de académicos probó una herramienta certificada para detectar edemas y microhemorragias en la Resonancia Magnética sobre Alzheimer. Aumentó la sensibilidad de los radiólogos, pero también generó falsos positivos, por lo que es razonable usarla como segunda lectura tras un examen minucioso. La conclusión práctica es obvia: primero el juicio de expertos, luego la verificación algorítmica.

Colonoscopia y «deshabilitación»

En la colonoscopia, la observación con IA aumentó la detección de pólipos, pero cuando se retiraba el instrumento los médicos detectaban menos lesiones precancerosas que antes, sugiriendo pérdida de foco sin el apoyo automatizado. Este efecto de observación de «deskilling» se correlaciona con menores exploraciones de campos visuales periféricos al privilegiar demasiado el apoyo computarizado.

Evitar la descarga cognitiva

El uso de IA sin pensamiento crítico puede disminuir la capacidad de contrastar y verificar, un efecto similar a la opción de navegación GPS con respecto al sentido de orientación humano. La formación sanitaria debe enseñar a trabajar con y sin IA, abordando su salida como segundo dictamen y no como dictamen definitivo.

Arquitectura de Elección Inteligente

El artículo propone diseñar sistemas que inviten a “mirar de nuevo” en lugar de dictar veredictos, lo que se conoce como Arquitectura de Elección Inteligente. En vez de “aquí hay una hemorragia”, el sistema resalta la región y sugiere “revise esta zona”, reforzando razonamiento clínico y juicio humano.

Caso práctico cardiovascular

Un importante sistema hospitalario de la India reemplazó un único puntaje de riesgo de infarto por desgloses personalizados que explican qué factores lo impulsan, permitiendo acciones concretas sin mermar la autonomía clínica. Es un “empujón suave” que guía decisiones y mantiene al profesional en control.

Cómo se usa hoy la IA

Los médicos utilizan la IA en la documentación, las instrucciones de alto nivel, la traducción, el apoyo diagnóstico y los planes de atención, con un creciente entusiasmo a pesar de las reservas sobre la precisión, la integración y la rendición de cuentas. La clave es que la herramienta reduce la carga administrativa y libera tiempo para la relación clínica sin añadir nuevos riesgos.

Criterio para adoptar

Las tecnologías que perduran amplifican habilidades, como el estetoscopio o los análisis de laboratorio, sin sustituir el examen clínico. Antes de implementar IA, conviene preguntar si hace al profesional más reflexivo y propicia una segunda mirada; cuando afila capacidades humanas se obtiene lo mejor de ambos mundos.